Gato esfinge o shpynx
El gato Esfinge (Sphynx) suele ser relacionado con la época de los faraones en el antiguo Egipto, aunque en realidad es de origen canadiense y de una época más reciente, ya que el desarrollo de esta raza transcurrió entre 1966 y 1978.
Su característica más notoria es la de una apariencia calva, por lo que suele ser una alternativa ideal para aquellas personas que son alérgicas a los gatos y que no pueden vivir sin la compañía de un minino, aunque debes saber que, así como son de diferentes, estos pequeños también requieren de cuidados diferentes.
La piel de estos gatos es delicada, por lo que se debe tener cuidado con la exposición al sol, ya que puede causar quemaduras; esto significa que son animales para tener dentro del hogar.
Origen: Canadiense
Altura y peso: entre los 3,5 y 5 kilos.
Entrenamiento: Ideal para llevar a cabo un entrenamiento adecuado para mejorar su conducta, ya que no se consideran difíciles a la hora de practicar con él un hábito de comportamiento regular, para que adquieran unas costumbres idóneas en nuestro hogar.
De hecho, demuestran una habilidad y velocidad que impresiona a la hora de aprender ciertas cuestiones, como trepar o encaramarse en las puertas para observar, o sin ir más lejos, su nombre.
Carácter: Los gatos egipcios son alegres y cariñosos y están muy unidos a su dueño. También suelen ser bastante amigables con otras mascotas y es raro que actúen de manera agresiva. No es recomendable dejar a los esfinges solos en casa durante mucho tiempo porque son astutos y pueden aburrirse rápidamente.
Cuidados: Este tipo de razas suelen ensuciarse más rápido que los gatos con más pelo debido a la generación de grasa que se acumula en su piel, por lo que procura limpiar su cuerpo con una esponja o toallas húmedas adecuadas para gatos una vez cada 15 días para evitar la aparición de hongos y erupciones en su piel, pues, a diferencia de las otras razas, no pueden hacer una autolimpieza, lo que significa que dependen de tus cuidados para mantenerse limpios.